Hace tiempo que no me tomo el tiempo como algo serio, único y mio. Como ese fragmento de cielo particular para ser, para sentir, para crear. Pintar supone tomarse un tiempo, invertir ese tiempo en la acción de ser algo mas profundo de lo que uno es lo demás días, o incluso ese resto del día, donde uno es solo alguien que va al trabajo, o que camina sin rumbo, sin observar, sin detenerse. Hace tiempo no me detenia en el espacio blanco, hace tiempo que no me detenia en preparar el espacio para pintar, los materiales, el soporte, la música de fondo, el mate, las frutas, el perfume, la compañia, o la soledad necesarias para crear. Así, buscando ese tiempo, provocandolo, recortando, y reclamando este derecho que es mío y me permito, cierro el mundo. Pinto.
Primero, de ésta. Nueva serie, Maestros Nativos. Acrilicos sobre madera entelada. 100x80